Peregrinación de la Universidad Anáhuac Cancún al Santuario de Nuestra Señora Desatadora de Nudos: Un Acto de Fe y Gratitud
En un acto cargado de espiritualidad y devoción 120 colaboradores de la UAC realizaron una peregrinación al Santuario de Nuestra Señora Desatadora de Nudos
En un acto cargado de espiritualidad y devoción, 120 colaboradores entre administrativos y docentes de la Universidad Anáhuac Cancún (UAC) realizaron una peregrinación el pasado jueves 5 de octubre al Santuario de Nuestra Señora Desatadora de Nudos, lugar que hoy es un icono de la fe Mariana en Cancún. Esta fue una visita significativa, que unió a la comunidad universitaria en un viaje de fe y reflexión. Es de destacar que, este Santuario día a día se convierte en un punto obligado para visitantes católicos al Caribe Mexicano, por su atractivo natural y ambiente de paz.
Este peregrinaje fue organizado por la Pastoral Universitaria de la Universidad Anáhuac Cancún; en esta visita los peregrinos fueron recibidos con calidez y alegría por el P. Luis Pablo Garza Aguilar, L.C., quien es el párroco del Santuario y compartió emotivas anécdotas sobre la creación de este lugar sagrado. Situado en una región reconocida por sus atractivos turísticos, el Santuario de Nuestra Señora Desatadora de Nudos se ha convertido en un punto de referencia para los viajeros religiosos que llegan al Caribe Mexicano en busca de paz espiritual y conexión divina.
Durante la visita, el P. Jesús Quirce Andrés, L.C., rector de la Universidad Anáhuac Cancún, ofició una misa especial en agradecimiento por el peregrinar de la comunidad universitaria. La ceremonia fue un momento de profunda reflexión y gratitud, donde los asistentes fortalecieron los lazos comunitarios, agradecieron las bendiciones individuales y colectivas, y se fomentó, entre ellos, la espiritualidad y devoción por la Madre intercesora de Dios.
En la homilía el P. Jesus Quirce Andrés, pidió ver en María la Virgen, esa madre que siempre se preocupa por nosotros y que está ahí para reconocer nuestras verdaderas carencias y luego interceder ante Dios por nosotros, así lo remarcó cuando abordó el significado de Las Bodas de Caná en el Evangelio de Juan.
“Pidan a nuestra Madre, que ella con infinito amor intercede por nosotros, porque nunca nos olvida”, detalló el P. Jesús Quirce Andrés L.C.
La peregrinación no solo fue un viaje físico, sino también un viaje interior que permitió a los administrativos y docentes de la Universidad Anáhuac Cancún renovar su fe y encontrar inspiración en la serenidad del entorno. La experiencia dejó una huella imborrable en los corazones de los peregrinos, recordándoles la importancia de la comunidad, la gratitud y la confianza en lo divino.
Al finalizar la misa, el P. Jesús Quirce Andrés, L.C., expresó su gratitud a todos los participantes por su devoción y compromiso, subrayando la importancia de mantener viva la llama de la fe en el día a día de la vida universitaria, habló sobre los proyectos a futuro para ese hermoso santuario, que ya es una realidad turística. La peregrinación no solo fue un testimonio de la religiosidad de la comunidad universitaria Anáhuac Cancún, sino también un recordatorio de la importancia de la espiritualidad en la formación integral de los estudiantes, futuros líderes de acción positiva, y en la construcción de un ambiente académico y laboral lleno de valores y solidaridad.