En una emotiva ceremonia celebrada en la Iglesia Universitaria Santa María de Guadalupe, ubicada en el Campus Internacional de la Universidad Anáhuac Cancún, la comunidad universitaria se reunió el pasado domingo para honrar a su patrono, San Juan Pablo II. Este evento cobra especial relevancia de cara al 25 aniversario de la fundación del campus internacional, ya que fue el mismo San Juan Pablo II quien bendijo la primera piedra de esta universidad en sus inicios, estrechando así un lazo especial entre su legado y la comunidad Anáhuac.
La misa, presidida por el rector de la Universidad, el P. Jesús Quirce Andrés L.C., fue un momento significativo para los fieles, en particular para los jóvenes de las licenciaturas en Ciencias de la Comunicación y Dirección de Empresas de Entretenimiento, quienes reconocen en San Juan Pablo II una figura clave en el uso de los medios de comunicación como herramientas de evangelización. En su homilía, el P. Quirce destacó los grandes hitos del pontificado de Juan Pablo II, recordando su cercanía con las juventudes católicas y su espíritu incansable de peregrinación, que lo llevó a visitar más de 130 países, siendo México el primero en su lista.
"San Juan Pablo II fue un papa que no solo marcó la historia de la Iglesia, sino que inspiró a generaciones de jóvenes con su mensaje de esperanza y fe", expresó el rector. Durante su homilía, hizo mención de uno de los momentos más recordados de sus visitas a México, cuando el papa pronunció la famosa frase dirigida a los jóvenes: "No tengan miedo, para no tener miedo abran su corazón de par en par a Jesucristo... Solo él es el redentor del hombre, el Salvador". Estas palabras, aún hoy, siguen resonando en los jóvenes que han encontrado en él una guía espiritual.
Uno de los factores más importantes de la celebración fue la presencia de las reliquias de sangre de San Juan Pablo II, las cuales los fieles, en su mayoría jóvenes estudiantes, pudieron tocar y encomendarse al Santo. Esta oportunidad brindó a los presentes una conexión tangible con la santidad y el legado del papa peregrino, quien, como señaló el rector, "fue el primer guadalupano, un ferviente siervo de María la Virgen".
El evento también contó con la presencia de los directores de las diferentes escuelas de Medicina de la Red Anáhuac, quienes, junto con el resto de la comunidad universitaria, encomendaron sus labores y proyectos a San Juan Pablo II.
Después de la ceremonia, las conmemoraciones concluyeron con una oración en la Plaza de San Juan Pablo II frente a su imagen y con un convivio en el que se realizó una presentación audiovisual que destacó los logros y la vida del hoy Santo, resaltando su papel como creador de la Jornada Mundial de la Juventud y su inigualable capacidad para comunicarse con los jóvenes.
Este homenaje reafirma la relación especial que la Universidad Anáhuac Cancún ha mantenido con San Juan Pablo II desde sus inicios, y renueva el espíritu de la comunidad en la misión educativa y evangelizadora que caracteriza a la institución, además de su liderazgo de acción positiva.