El ahorro en los jóvenes

Organismos como la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), ha trabajado continuamente en el desarrollo de estrategias para la educación y alfabetización financiera, reconociendo que esta es una habilidad cada vez más importante dentro del desarrollo de los individuos. (2012). Ellos definen a la educación financiera como “el proceso mediante el cual los individuos adquieren una mejor comprensión de los conceptos y productos financieros y desarrollan las habilidades necesarias para tomar decisiones informadas, evaluar riesgos y oportunidades financieras, y mejorar su bienestar” (OECD,2005 p.13). También se debe definir la alfabetización financiera;” la combinación de concienciación, conocimientos, habilidades, actitud y comportamientos necesarios para tomar decisiones financieras informadas y, en última instancia, alcanzar el bienestar financiero individual”. (Atkinson y Messey, 2012).

Hay que recordar que el incremento de la educación financiera dentro de un país y el desarrollo de nuevos lideres desde temprana edad, apoyan en la generación de mayor desarrollo social e innovación dentro de una nación.

En México existe cada vez más una conciencia del concepto cultura financiera y la gente empieza a querer conocer. Este tema entre los jóvenes universitarios debe ser prioridad antes de que se unan al mercado laboral. Según Zapata y Cabrera (2016), nos dicen lo siguiente:

“Una sociedad que no sabe cómo planear sus ingresos y gastos, que no posee una cultura de ahorro y desconoce cómo adquirir deuda responsablemente, es decir, sin afectar sus finanzas, no puede mejorar su bienestar social, y tampoco contribuye de manera eficiente al desarrollo económico de su país. Un factor que contribuye al desarrollo de la cultura financiera de la población es la educación financiera”.

Es por ello la importancia de promover el ahorro a todos los niveles, e ir formando en los jóvenes universitarios el hábito de este ya que son el fututo del país y depende del ahorro adicional que generen, les permitirá conservar en su vejez la misma calidad de vida que en su etapa productiva.

No debemos dejar de lado que la mayor parte de la educación y cultura financiera que han recibido hoy nuestros jóvenes universitarios proviene de la educación que recibieron con sus

familias, es de gran importancia conocer como la población ha valorado el ahorro y con base en qué toma sus decisiones sobre el consumo presente o futuro.

Debemos fomentar el ahorro en todas las edades, desde temprana edad, hasta dentro del propio núcleo familiar ya que el ahorro es el principal concepto del cuál nace el estudio sobre las finanzas personales y es a través del ahorro que se logra fomentar un mayor desarrollo y bienestar económico dentro de una nación.

Escrito por: Heidi Alaluf, Coordinadora de la Licenciatura en Dirección Financiera

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